La presión arterial alta, o hipertensión, afecta aproximadamente uno de cada cuatro adultos. Esta condición causa una sobrecarga sobre el corazón y los vasos sanguíneos y aumenta considerablemente el riesgo de accidente cerebrovascular y enfermedad cardíaca.
Las nuevas investigaciones indica que el sistema cannabinoide endógeno desempeña un papel en la regulación de la presión arterial, aunque su mecanismo de acción no se entiende bien.[1] Los estudios en animales demuestran que la anandamida y otros endocannabinoides suprimen profundamente la contractilidad cardíaca y la hipertensión, pueden normalizar la presión arterial, [ 2-3] ha llevado a algunos expertos a especular que la manipulación del sistema endocannabinoide «puede ofrecer nuevos enfoques terapéuticos en una variedad de trastornos cardiovasculares». [4]
La administración de los cannabinoides naturales ha producido efectos cardiovasculares en conflicto sobre los seres humanos y animales de laboratorio.[5-9] La respuesta vascular en humanos en las condiciones experimentales se caracteriza típicamente por un leve aumento de la frecuencia cardíaca y la presión arterial. Sin embargo, la tolerancia completa a estos efectos se desarrolla rápidamente y los riesgos potenciales para la salud parece mínima.[10-11]
La administración de cannabinoides en animales se asocia típicamente con la vasodilatación, hipotensión y bradicardia transitoria,[12], así como una inhibición de la aterosclerosis ( endurecimiento de las arterias ). [13-15] La administración de cannabinoides sintéticos también han demostrado reducir la presión de la sangre en los animales y no se han asociado con cardiotoxicidad en los seres humanos.[16]
REFERENCIAS
1] Franjo Grotenhermen. 2006. Clinical pharmacodynamics of cannabinoids. In Russo et al (Eds) Handbook of Cannabis Therapeutics. Binghampton, New York: Haworth Press.
[2] Batkai et al. 2004. Endocannabinoids acting at cannabinoid-1 receptors regulate cardiovascular function in hypertension. Circulation 110: 1996-220.
[3] Pacher et al. 2005. Blood pressure regulation by endocannabinoids and their receptors (PDF). Neuropharmacology 48: 1130-1138.
[4] Ibid.
[5] Cecilia Hillard. 2000. Endocannabinoids and vascular function. Journal of Pharmacology and Experimental Therapeutics. 294: 27-32.
[6] Kunos et al. 2000. Endocannabinoids as cardiovascular modulators. Chemistry and Physics of Lipids 108: 159-168.
[7] Reese Jones. 2002. Cardiovascular system effects of marijuana. Journal of Clinical Pharmacology. 42: 58-63.
[8] Ribuot et al. 2005. Cardiac and vascular effects of cannabinoids: toward a therapeutic use? Annales de Cardiologie et d’Angeiologie (France) 54: 89-96.
[9] Steven Karch. 2006. Cannabis and cardiotoxicity. Forensic Science, Medicine, and Pathology. 2: 13-18.
[10] Ibid.
[11] Rodondi et al. 2006. Marijuana use, diet, body mass index and cardiovascular risk factors. American Journal of Cardiology 98: 478-484.
[12] Reese Jones. 2002. op. cit.
[13] Steffens and Mach. 2006. Towards a therapeutic use of selective CB2 cannabinoid receptor ligands for atherosclerosis. Future Cardiology 2: 49-53.
[14] Steffens et al. 2005. Low dose oral cannabinoid therapy reduces progression of atherosclerosis in mice. Nature 434: 782-786.
[15] Steffens and Mach. 2006. Cannabinoid receptors in atherosclerosis. Current Opinion in Lipidology 17: 519-526.
[16] Steven Karch. 2006. op. cit.